Hace unos días les preguntamos si seguían militando el 8M y por qué. Nos llegaron muchísimas opiniones y aportes que queremos dejar reflejados y poner sobre la mesa para seguir discutiendo al interior de los feminismos.
La gran mayoría confirmó que el 8M no es una fecha olvidada sino que sigue vigente al grito de ¡NOS SIGUEN MATANDO! Así se pone de manifiesto que seguimos exigiendo derechos, seguimos experimentando violencias (que -como pudimos desgraciadamente comprobar este último feriado-se acrecientan en estas fechas) y más.
Pero, junto a estos reclamos, surgen señalamientos ricos que van en línea con la perspectiva de esta asociación civil: la necesidad de incluir activamente los reclamos de nuestras compañeras trans y travestis de la mano de un movimiento des-ensencialista y des-biologicista, porque mujer no hay una sola (y por eso elegimos el título de “mujerES” para hoy) ni hay un único modo de habitar lo femenino: cuestionemos quiénes entran y quiénes han quedado afuera de esta categoría, sigamos ampliando este movimiento gigante para que nadie quede afuera.
Por otro lado, llegaron pedidos de reivindicar el énfasis que la fecha hace sobre el carácter de “trabajadoras”, para no olvidar que nuestros reclamos por derechos laborales han encontrado resistencias, violencia y muerte, tal como encuentra nuestra sola existencia en lo cotidiano. Para no olvidar que todavía sesgos, prejuicios y estereotipos obstaculizan las carreras de mujeres trans y cis, lesbianas, travestis, bisexualas, pansexualas y feminidades nb.
Seguimos entonces militando cada 8M por aquellas que ya no están, por las que estamos, por nuestros derechos laborales, por el cupo laboral trans, por las maternidades en lucha y por todo el espectro de feminidades diversas, por nuestro derecho a trabajar y a existir libres de violencias.