Hoy se cumplen 30 años de la primera marcha del orgullo en Argentina, cuya consigna fue “Libertad, igualdad, diversidad”.
Una marcha a la que asistieron aproximadamente 300 personas, muchas de ellas con la cara tapada, como estrategia que les protegería de las consecuencias de saberse abiertamente homosexuales.
A 30 años de este primer grito colectivo, hoy seguimos reclamando una sociedad más justa y menos hipócrita, continuamos exigiendo el fin de la discriminación basada en orientación sexual justamente en medio de una ola conservadora que asegura que estamos adoctrinando a sus hijxs, y prohíben películas mientras vemos banderas arcoiris prendidas fuego por el avance de esta derecha que no se cansa de odiar.
Hoy más que nunca hay que seguir levantando estas banderas y defendiendo esta lucha que cada ve es más amplia y más necesaria.
Hoy es tarea de todxs construir una sociedad sin clósets que nos obliguen a escondernos y vivir en estado de alerta, sin discriminación que implica la exclusión de oportunidades y derechos, sin odio y con empatía para entender que la diversidad es algo a celebrar, no a condenar..
Arte por @drawplush